Hay veces que no somos completamente conscientes de lo importante que es mantener un servicio de limpieza hospitalaria óptimo. No cumplir con los protocolos exigidos puede conllevar graves consecuencias tanto al centro hospitalario como a sus pacientes.
¿Conoces las infecciones nosocomiales? Estas infecciones conocidas también como las relacionadas con la asistencia sanitaria (IRAS) suponen el principal indicador de la calidad de asistencia de cualquier hospital.
Además, son una causa importante de morbimortalidad.
Según estudios, las infecciones nosocomiales suponen entre un 5 y 10% de la cifra total de infecciones en pacientes. La mayoría de las personas que las contraen, vuelven a ser ingresados en sus respectivos hospitales.
Afortunadamente, hay entidades encargadas de regular estos problemas. En este caso, el EPINE (Estudio de Prevalencia de las Infecciones Nosocomiales de España) recoge datos sobre las repercusiones de esta enfermedad adquiridas en el ambiente hospitalario para poder hacerles frente.
Algunas de las vías más frecuentes de infecciones nosocomiales suelen ser por vía urinaria, postquirúrgica, respiratoria y bacteriana.
Este problema no solo supone un peligro gravísimo para los pacientes, también implica graves consecuencias para el centro hospitalario. La mayoría de las veces, todo deriva en denuncias contra el hospital, una lucha larga, cruel para ambas partes y muy costosa.
La única solución ante esta preocupación es atesorar un excelente servicio especializado en limpieza de hospital que garantice la seguridad de tus pacientes.
¿Quieres saber cómo conseguirlo? A continuación, te desvelamos las 6 claves esenciales para proporcionar un buen servicio de limpieza de hospital.
Claves para proporcionar una limpieza hospitalaria adecuada
En primer lugar, cada hospital debe contar con un protocolo de actuación de limpieza específico, según el funcionamiento del centro. Sin embargo, algunos puntos son obligatorios y comunes para proporcionar un buen servicio de limpieza en un hospital.
- Exhaustiva tarea de desinfección.
Es muy importante la tarea de limpieza, pero casi igual o más la de desinfección. Se basa en acabar con la suciedad inorgánica y orgánica:
- Microorganismos,
- Bacterias,
- Patógenos,
- Gérmenes, etc.
Estos agentes suelen pulular por todo tipo de superficies y utensilios médicos. Si se realiza una buena desinfección, se puede acabar con el 99% de estos microorganismos.
2. Elección productos adecuados para la limpieza en hospitales.
Hay que saber escoger el producto adecuado para la limpieza hospitalaria. Es fundamental diferenciar las zonas en las que se van a utilizar, por ejemplo, no se puede utilizar los mismos productos para una UCI que para una sala de espera.
Para la limpieza de zonas generales, normalmente se utilizan 2 elementos básicos:
- Desinfectantes: como se ha comentado anteriormente, fundamental para la destrucción de microorganismos nocivos. Se debe prestar especial atención en el grado de toxicidad del desinfectante.
- Detergentes: hay que tener en cuenta la capacidad antiséptica del detergente. Debe emulsionar y saponificar las grasas, dispersar y suspender la suciedad y disolver las proteínas.
Es fundamental que el personal del servicio de limpieza utilice guantes de látex para garantizar la calidad de la limpieza sin perjudicar su propia salud.
3. Diferenciar técnicas de limpieza específicas según el área de actuación como pueden ser:
- Limpieza de la zona quirúrgica.
- Limpieza de habitación de aislamiento.
- Limpieza de una habitación ocupada.
- Limpieza de servicios y aseos.
- Limpieza del suelo.
- Limpieza de conductos del aire acondicionado.
- Otras zonas como ascensores, cristales o paredes.
4. Uso de maquinaria especializada.
Para realizar una buena limpieza en hospitales, es indispensable contar con maquinaria especializada, sobre todo, en las limpiezas profundas y periódicas. Un ejemplo es el uso de nebulizadores.
5. Utilización de vestimenta adecuada por parte del personal de limpieza.
Utilizar la vestimenta adecuada puede ser la clave del servicio de limpieza hospitalaria. Podemos poner en riesgo todo el proceso solo por no utilizar el uniforme adecuado o por no utilizar guantes de látex adecuadamente.
6. Desempeño limpieza hospitalaria por personal capacitado.
El personal de limpieza debe estar correctamente formado y familiarizado con los métodos efectivos en el desempeño de las técnicas de limpieza. Además, debe saber utilizar la maquinaria precisa, cumplir con las normas de bioseguridad y con las de riesgos laborales.
De esta forma, tanto ellos como el hospital evitarán riesgos de contagios indeseados. El personal especializado es una pieza fundamental en todo el proceso de limpieza hospitalaria.
Confía en un profesional del sector
Como habrás podido contemplar, proporcionar una excelente limpieza hospitalaria no es fácil.
No sólo se deben tener en cuenta estos 6 consejos claves, también se debe prestar especial atención a otros factores puntuales que pueden surgir durante el proceso. Ya hemos vivido con la COVID-19 lo complicado que es controlar los contagios en los hospitales.
Por eso, nuestra más sincera recomendación es que confíes en profesionales del sector para realizar estas tareas. No estamos tratando una simple cuestión de higiene. En numerosos casos una mala limpieza hospitalaria puede suponer la causa de mortalidad para tus pacientes.
Es primordial que confíes en profesionales que conozcan el sector y el modus operandi adecuado para la limpieza de hospital.
En definitiva, contar con un protocolo de seguridad y actuación para proporcionar un buen servicio de limpieza hospitalario es fundamental para garantizar la supervivencia y salud, tanto de tus pacientes como de tu hospital.
¡No lo dudes! Pide ayuda a un profesional, las Facility Services pueden ser una buena solución en la que delegar las tareas de higienización, limpieza y mantenimiento de tu hospital y obtener excelentes resultados.
os indeseados. El personal especializado es una pieza fundamental en todo el proceso de limpieza hospitalaria.